martes, 27 de octubre de 2009

Martes de salsa


Hoy no tengo mucho que decir, estos días he estado muy ocupada y no me gusta porque rompe con mi rutina de contemplación. Sin embargo, me comprometí (conmigo) a escribir cada semana, sobre todo para compartir con ustedes algo de mi vida por acá. Les cuento que he hecho todo el intento por conocer las costumbres de los catalanes, saber más sobre ellos, sobre su vida cotidiana, ya saben, ver qué comen, cómo, cuándo y por qué... delirio de antropóloga. Pero tengo que decir que esto ha sido un poco complicado. Los catalanes son como los nórdicos de España, o sea, serios, caras largas, poco sonrientes y muy cerrados, aunque también muy decentes y poco ruidosos. Don Prehistoric sólo tiene un compañero catalán y es el típico señor de 65 años al que se le antojó volver a estudiar, hay además francesas, iraquíes, un eritreano (¿saben en donde está eso? yo hasta ahora no lo sabía) y una chilena. No sé que es lo que sucede pero parecería que hay un imán que une a todos los latinoamericanos, la primera persona con la que empezamos a hacer contacto fue con la chilena, de alguna extraña manera ahora hemos estado frecuentando a varios mexicanos (sí hay más en este pueblo), colombianos y hasta cubanos. Y claro que nos llevamos muy bien pero no es lo que tenía en mente, yo quería conocer y saber todo sobre los catalanes y es que esto de "lo latino" como una especie de identidad que compartimos todos los que nacimos en Latinoamérica siempre me ha parecido absurdo, a ver yo no me siento nada parecida a una cubana o a una argentina, pero bueno la verdad es que esto me pone a dudar. Además de lo obvio, ¿en realidad hay algo que hace que nos llevemos mejor que con personas de otra nacionalidad, área, región? No sé, me niego a verme como "latina"... y sin embargo ahí estamos, con nuestras primeras amistades...Por cierto, hoy es martes de salsa.

martes, 20 de octubre de 2009

Los vecinos




Los pájaros me dan miedo, sí miedo… Y no porque crea que un día se unirán y me atacarán cual película de Hitchcock, pero no sé, hay algo en ellos que me parece … sospechoso. Por eso prefiero no verlos detenidamente, ¿saben cómo sucede cuando te quedas viendo algo por mucho tiempo y entonces lo empiezas a ver diferente y hasta asusta? Espero que sí les haya pasado si no, la freak soy yo… bueno total, así me pasa cuando empiezo a verlos demasiado tiempo. Y ahora he tenido que lidiar con esto. Vivir en el casco viejo de Tarragona es precioso, sales por las mañanas o noches y hay vida, sí vida, aunque para los sujetos de ciudad esto parezca normal aquí en Europa es algo raro si no estas en una capital. Tengo además que decir que soy afortunada ya que para llegar a mi hogar hay que pasar una muralla medieval, construcciones romanas y caminar por callejones muy mediterráneos, sin embargo, como buen centro hay palomas. No nada más son pájaros sino que son los de la peor especie. Resulta que desde la ventana del baño y de la cocina se puede ver un gran nido de éstas, que digo uno, son en realidad como tres, pero bueno, uno parece que está en desuso, otro no se logra ver muy bien y otro está justo enfrente de mi cocina el cual se ve perfectamente bien. Las palomas han hecho ahí un gran nido, impresionante, no sé de qué estará hecho, lo que sí sé es que cada vez está más grande. Con el tiempo libre que tengo he visto crecer a las palomitas desde que no tenían plumas y seguro las veré volar por primera vez, creo además que ya sé distinguir entre machos, hembras y creo… creo que hasta los puedo reconocer. Sí soy esa vecina, la que no tiene nada mejor que hacer mas que observar lo que hacen los vecinos y mis vecinos son animales que vuelan y propagan enfermedades. Don Prehistoric está preocupado, cree que si paso demasiado tiempo aquí comenzaré a platicar con ellas, yo le explico que para que eso suceda tendré que perder el miedo o asco a esos animales y por lo que veo no pasará pronto. Uno de los grandes problemas independientemente de su existencia o no es que como se creen dueñas de todo el vecindario se pasean por mis balcones como si les pertenecieran y luego quedan rastros de su presencia. Una amistosa cubana me explicó que para mantenerlas alejadas había que armarse de rehiletes, al parecer los ven como peligrosísimos monstruos-comepalomos lo que los mantiene fuera de los balcones. Yo sólo espero que éste no sea un remedio tipo el que se usa en el DF en donde se cree que las botellas de agua tiradas por las jardineras alejan a los caninos. Por lo pronto mientras no tenga otra solución comenzaré a armar mi arsenal con todo tipo de rehiletes, si no sirven por lo menos están cotorros. ¿Saben ustedes de alguna solución a los problemas vecinales?

martes, 13 de octubre de 2009

La calor


A mi me prometieron fríos como nunca los iba a experimentar en nuestro tropical país. Yo, previsora, me traje dos gigantes maletas de 24 kilos cada una, más una pequeña de 10 kilos repletas de ropa para aguantar los inviernos europeos y es que: “Vas a llegar en otoño y ya empieza a hacer frío”. Bueno tengo que informarles que estamos a 28 grados con un sol impresionante y hace, por mucho, más calor que en DF, por lo menos en esta época. Y por lo que me han comentado los catalanes así estará hasta entrado diciembre, la temperatura bajará un poco en enero pero creo que lo mínimo serán 10 grados y sí: “Algún día podrá llegar a 0 grados, pero es que ahora con los cambios climáticos ya no se sabe” dice el señor de la Xarcutería. Según él este año hace más calor que los anteriores y teme que cada año haga más calor, claro si ahora las temperaturas oscilan entre los 25 y 30 grados no quiero saber como estará el siguiente verano, yo también tengo miedo. Como el clima es bueno hemos pasado los domingos en la playa y sí son muy bonitas: arena dorada y agua verde-azulada, tal cual Puerto Vallarta o Acapulco. Pero tengo que decir que para una persona acostumbrada a temperaturas cálidas entrar al mar es una cuestión de vida o muerte: está congelado. Aún así la gente nativa se mete al agua como si nada y lo hacen sin ropa, ya que son playas nudistas, lo que según yo es peor porque se siente más ¿no? Yo sólo he logrado entrar una vez y apenas pude salir, creo que mis músculos se estaban entumiendo. Algunos dirán que estamos mal acostumbrados, creemos que toda playa tiene que ser tropical… pues sí y la verdad es que éstas se sienten raras. No solamente porque aquí no hay vendedores ambulantes que ofrezcan desde pescadillas, joyas o aceites de coco pa agarrar mejor el bronceado, lo que me hace pensar en un futuro negocio... no, además de eso el sol es también diferente. Resulta que nunca está arriba de nuestras cabezas, obviamente siempre se puede ver en lo alto pero no pega como allá, tal vez así es el otoño. Y sí, les hacen falta una o dos palmeras de cocos y aguas no tan frías pero estas desventajas empequeñecen con la simple idea de poderme acostar al sol sin sentir sus efectos: por fin puedo estar un largo tiempo “asoleándome”, que en realidad no sucede porque el sol no quema pero me parece fabuloso simplemente poderlo intentar. Confieso, para una persona que como yo usa bloqueador todos los días salga o no de la casa, estas playas se acercan a la perfección.

martes, 6 de octubre de 2009

Amigos

Tengo que abrir el blog con lo que ha rondado en mi cabeza desde que nos hemos establecido y desde que hemos empezado a hacer una vida cotidiana: los amigos. Sí, no quiero verme cursi pero nunca había pensado en la amistad tanto como ahora. De repente me resulta imprescindible y no lo había meditado nunca, no porque me crea una persona amiguera, pero creo que tengo los suficientes y nunca me había visto en la necesidad de hacer más. O sea, todos vamos creciendo y teniendo amigos, 2, 3, 10, 100 pero no hacemos un plan para tenerlos, ¿verdad? Bueno, ahora aquí me he dado cuenta que tengo que hacer amigos y de repente me resulta una tarea complicadísima, ¿cómo es que se hace eso? No puedes llegar con alguien presentarte y decirle: quiero ser tu amiga. Esto es difícil, sobre todo cuando no tienes ninguna actividad y es que tal vez no todos saben pero esto de la legalización no ha sido tan rápido y todavía no sé que demonios me van a pedir porque me han dado una cita hasta dentro de un mes para ver mi “situación” y bueno mientras tanto no puedo trabajar. Lo mejor sería meterme a clases de algo pero como sabrán este mundo es carísimo y bueno igual una clase de algo no es suficiente. Intenté meterme a la maestría de antropología urbana, la verdad escogí esta porque las opciones eran: enfermería, arqueología del cuaternario o antropología urbana. No lo logré por más que rogué, resulta que si se han cerrado las convocatorias ya no se puede, aunque solamente hayas llegado un día tarde. ¿Qué delicados no? Me invitaron a estar de oyente pero con la promesa de que tendría que entrar el próximo año, y yo pienso: ¿volver a tomar las materias? No es para tanto. Mientras los días pasan yo me voy paseando por la ciudad, hago ejercicio ¿me iré a poner bien buena?, trabajo en la INNOMBRABLE –saben a lo que me refiero-, veo pasar la vida y ahora les escribo pa compartir con ustedes mi vida. Si tienen alguna fórmula o algo así que explique cómo hacer amigos nuevos ahí me avisan.

Cómo hacer amigos

Desde Tarragona

Amigos, familia, queridos:

Abro este blog no porque tenga algo interesante que decir, la verdad es que no tengo nada mejor que hacer y además los extraño. Me encantaría sentarme con ustedes y tomar un café y chismear y platicar de banalidades. Como eso por el momento no es posible quiero escribirles y de esta forma platicar de lo que nos venga en gana, pero espero respuesta suya en comentarios y tengan toda la confianza de decir lo que se les antoje. Escribir de repente me resulta demasiado formal como para tratar cualquier cosa, tal vez es que todavía tengo las reminiscencias de la tesis. Pero bueno les platico que este será un blog de lo que sea, de lo que pasa por acá, de mis pensamientos y los suyos y si quieren escribir los invito. Espero que continúe por algún tiempo y no me harte o encuentre algo mejor que hacer… o sí, bueno ya veremos que pasa. Y con esto queda inaugurado el blog de … lo que sea, desde las tierras catalanas.